Duración: 5 Horas
Dificultad: Media
Ruta bonita y espectacular, esta muy bien señalizado, la orientación es un poco complicada.
Comenzamos nuestro camino en el área recreativa de río Chico por la pista asfaltada que pasa por allí, a unos cien metros nos encontramos con un cartel indicativo donde están indicados los diferentes senderos que podemos hacer por esta zona. El sendero se coge a la derecha del cartel por un camino hormigonado, aunque nosotros decidimos continuar por la pista para luego bajar por uno de los senderos.
Plano de los senderos
Ohanes
Área recreativa de río chico
Cartel indicativo de los senderos
Barranco de río chico
Por el camino hicimos un nuevo amigo, Sproky
Durante gran parte de la subida nos encontraremos entre bancales
En una primera parte el camino transcurre entre bancales, conforme cogemos altitud abandonamos los bancales para pasar a un bosque de encinas y pinos, si estamos atentos podemos ver alguna ardilla. Cuando nos encontramos solo con bosque de pinos nos aparece un cruce de caminos, uno, a la izquierda, que sigue subiendo y otro, a la derecha, que baja, nosotros cogemos el de la derecha para unos kilómetros mas adelante encontrarnos con el sendero.
Bajando por la pista
Cuando llevamos un rato caminando nos encontramos con un cartel indicativo que nos señala el sendero de Ohanes por la margen izquierda del río chico, cogemos este para bajar al pueblo.
Por el sendero nos topamos con este pequeño castaño
Sendero de Ohanes
David y Antonio
Río Chico
Conforme nos acercábamos al pueblo se nos echó una nube encima, en un principio tuvimos que aplicar la velocidad de chispeo, pero al final acabamos cogiendo velocidad de granizo, y todo esto sin un maldito chubasquero, el granizo nos machaco hasta el coche, una vez llegamos a este volvió a salir el sol. Para recompensarnos por el esfuerzo realizado nos dimos un buen homenaje en el restaurante el Barroso de Padules.
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