Duración: 5 Horas
Dificultad: Baja
El antiguo poblado minero de Las Menas (Serón), ahora convertido en instalaciones de turismo rural, sirve de punto de partida para un completo recorrido de sus inmediaciones, donde se entremezclan una rica arqueología minera y el magnífico entorno natural de la Sierra de los Filabres.
Este sendero recorre las cumbres de la Sierra de los Filabres, en la proximidad del antiguo poblado minero de Las Menas.
Desde el campamento turístico tomaremos un sendero local que surge hasta Los Cortijillos. Nos acercaremos, así, a unos antiguos talleres e instalaciones y a una rambla que nos proponemos remontar siguiendo las balizas del sendero.
Antiguos talleres e instalaciones.
Un breve trecho nos brinda el acceso a una inmensa gruta. Descenderemos, de nuevo, la rambla, llegando a los talleres ya visitados. Los sobrepasamos y continuamos por el sendero que parte a la derecha y que nos acerca hasta la boca de la Mina de la Concepción; inconfundible oquedad reconocible por una caseta que preside su bocamina y por una antigua placa colocada sobre el túnel. Tomaremos las debidas precauciones para la visita, volviendo hacia el inicio para descender la carretera que va a Serón y acercarnos hasta otro sector del poblado.
Entrada a la gruta.
Mina de la Concepción.
Retrocedemos por la carretera que nos trajo hasta aquí. Sobrepasamos el indicador que anunciaba "Las Menas" y tomamos la amplia carretera que surge ante nosotros. Muy pronto comienza una pista de tierra que, en regular estado, atraviesa un extenso pinar.
Mientras recorremos la ladera, sin ganar ni perder altura, un claro entre la vegetación nos deja ver el cerro que circundaremos: el Pico Yedra (1.943 m.). Prontamente llegamos a una vieja mina donde nos encontráremos un claro en la vegetación, donde hay una bifurcación en la que optaremos por el desvío de la izquierda. Continuamos por la pista que desaparece a los pocos metros, para convertirse en un bonito sendero sobre profundo barranco del Rascador que nos acompaña, por la izquierda, contemplando potentes mantos de calizas fuertemente erosionados. A cada paso reconocemos como las coníferas mantienen su protagonismo sobre el estrato arbóreo, a la vez que recordamos que en estos espacios existen una veintena de aldeas que fundamentaban su actividad en torno al núcleo principal de Las Menas.
Vista del Barranco del Rascador y de los poblados.
Bajo las coníferas también encontramos gran cantidad de setas.
Barranco del Rascador.
Un poco mas adelante el bosque de coníferas se convierte en un extenso encinar, en esta zona nos encontramos un fuerte pendiente, al pasar esta nos volvemos a encontrar con una pista forestal, continuamos por la pista nuestro camino, al poco tiempo aparece a nuestra derecha un camino, el cual ignoramos. Mas adelante nos saldrá otro camino a nuestra izquierda que tampoco cogeremos, continuamos por la pista hasta llegar a una vieja cortijada en ruinas (La fuentecilla), donde encontraremos una fuente y una balsa, nos sorprende el intenso verdor de la zona.
Zona de la Fuentecilla.
Aquí la pista da un giro a la izquierda de 360º, pasando por delante de la balsa y la fuente, continuamos por la pista hasta que esta se acabe. Al final de la pista comienza un sendero a nuestra izquierda, la entrada al sendero esta tapada por un pino caído, lo pasamos y continuamos por el sendero, hasta que avistamos una balsa grande (La balsa del Layon), aquí el sendero se bifurca, nosotros cogemos el que nos sale a nuestra derecha, dejando la balsa a nuestra izquierda. El sendero continua hasta llegar a una ermita donde volvemos a coger una pista que nos lleva hasta Bacares.
Ermita.
En nuestro camino hacia Bacares nos encontramos con una pareja de águilas reales sobrevolando la zona, una de ellas paso a pocos metros de nosotros , impresionándonos con su majestuosidad y el sonido al batir las alas ¡¡¡Increíble!!!.
Águilas reales.
En las proximidades a Bacares podemos observar una bella estampa de pueblo y una fantástica panorámica de la Tetica de Bacares (2080 mts.)
Bacares.
Tetica de Bacares (2080 mts).
La vuelta a Las Menas la realizamos por la carretera, unos 8 Km hasta el poblado. En total habremos caminado unos 21 Km en unas 5 horas por un bello paraje el cual recomiendo a todo el mundo.
Este sendero no esta señalizado ni hay ningún tipo de marca para seguirlo, así que puede ser un poco complejo de realizar, aun así a nosotros no ha salido bien la jugada.